La alcaldía de San Salvador Centro desmontó puestos informales en el Centro Histórico, retirando a 2,500 vendedores como parte de su plan de revitalización.
El líder religioso dijo que el manifestarse es un derecho que no puede ser restringido y que no ha sido limitado bajo el actual régimen de excepción que ha implementado el Gobierno.
Los norteamericanos indicaron, que existen fuertes posibilidades de que se prolongue nuevamente esta medida; asimismo, sostuvieron que varios salvadoreños que han obtenido la ciudadanía de esa nación han sido detenidos.
El 27 de marzo, la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó un estado de excepción a petición del presidente Nayib Bukele, tras el repunte de homicidios relacionados con las pandillas o maras durante el fin de semana precedente.
El sindicalista aseguró que el ministro de Trabajo los quiere "hacer ver como delincuentes y criminales". El funcionario les respondió que es un "vagabundo mercenario".
El desalojo de la calle Rubén Darío impactaría entre 500 a 1 mil personas que se dedican a la venta informal, por lo cual estarían perdiendo alrededor de US$200 diarios
El Jerarca de la Iglesia Católica Salvadoreña justificó al gobierno, que en algunas condiciones este tipo de medidas es necesario realizarlas, para controlar algún problema social.
El secretario de Estado de EEUU, dijo que “ahora más que nunca, resulta esencial” que se extradite a los líderes de pandillas para que sean juzgados en Estados Unidos.
El régimen de excepción que aprobó a finales de marzo la Asamblea Legislativa, de amplia mayoría oficialista, a petición de Bukele, llega hasta finales de este mes.
Les advierte a sus ciudadanos que si ya están en El Salvador que piensen “si realmente necesitas estar allí. Si no necesita estar allí, debe de pensar en irse”.