Por Carlos Imendia.
Siempre se le consideró al Papa Francisco como un afín a la izquierda, al peronismo, progresista, amigo de líderes de izquierda, dada su preferencia por los pobres y marginados de la sociedad y por abrir la Iglesia a las minorías, castigar a los curas pederastas, a los cardenales mafiosos arraigados a los manantiales financieros de la Santa Sede. Pero lo cierto es que en su último adiós, en su funeral, los dictadores y seudo dictadores brillaron por su ausencia.
Entre ellos Maduro, que ha perseguido a la Iglesia y a acosado a obispos y sacerdotes con sus matones por exigir democracia, en su nuevo (violentado) mandato inconstitucional, y que en las últimas elecciones ganó — La presidencia — el candidato Edmundo González Urrutia junto a María Corina Machado trapeando con Maduro las pasadas elecciones. Maduro mandó una comitiva encabezada por la alcaldesa de Caracas una almiranta de nombre Carmen Meléndez, que a su vez calificó como la artífice de gestionar la canonización de un santo venezolano José Gregorio Hernández en el mes de 2025, de las ultimas canonizaciones del papa Francisco. Eso me recordó que allá por 2015 acá en San Salvador, también se agenciaba la canonización de San Oscar Romero como logro de gestión por parte de la administración gubernamental de turno.
De Cuba, país donde también se reprime el culto religioso y se ha perseguido a la Iglesia católica encarnizadamente, no llegó el dictador de turno Diaz –Canel ninguno de los Castro o sus hijos, solo envió a su representante el vicepresidente Salvador Valdés Mesa.
Pero el más hipócrita de todos, Ortega, cuya personalidad no cuajará (por el miedo de salir de Nicaragua) con este tipo de funerales, y el que en algún momento se atrevió a criticar las elecciones papales criticándolas de dictatoriales, y que ha confiscado propiedades de la Iglesia Católica, que manda a sus cuerpos de seguridad como la policía nacional a intimidar a fieles católicos a la salida de sus templos por órdenes de la vice presidenta Rosario Murillo, que mandó a prohibir procesiones para semana santa, que mantuvo en cautiverio , vulnerable a todo tipo de agresiones al obispo de Matagalpa Rolando Álvarez, ha expulsado a los jesuitas de Nicaragua y también expulsó a todas las mojas del país, el mismo antipático de Ortega y su mujer, hipócrita como Caifás, manda a un delegado a los funerales del papa, un diplomático de nombre Mauricio Gelli .
La oficina de Protocolo de la Secretaría de Estado del Vaticano confirmó 130 delegaciones confirmadas para el funeral del Papa Francisco, Los únicos líderes de izquierda visibles fueron el Presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, la presidenta de México , Claudia Sheinbaum no asistió , la Presidenta de Honduras iris Xiomara Castro de Zelaya sí estuvo presente.
Javier Milei, presidente de Argentina, que ofendió al papa en más de una ocasión, y a quien el papa, perdonó y recibió en audiencia, asistió a su funeral.
